¿Los rusos apoyan la guerra en Ucrania? Este tema ha sido discutido intensamente desde la invasión de febrero de 2022. Conforme a lo publicado en The Moscow Times por los periodistas independientes Farida Rustamova y Maxim Tovkaylo sobre las principales encuestadoras rusas (incluido el Centro Levada independiente y el VTsIOM controlado por el Estado), alrededor de 75% de la población apoya la invasión; sin embargo, muchos son profundamente escépticos de estas cifras.
Los funcionarios rusos tienen acceso a mucha más información sobre las actitudes de la que se divulga al público, y es bien sabido que el Kremlin vigila de cerca la opinión pública.
Un grupo de funcionarios, gestores políticos y expertos han estado realizando encuestas de opinión confidenciales sobre las actitudes hacia la guerra durante al menos seis meses. Rustamova y Tovkaylo tuvieron acceso a esos datos no publicados previamente.
Estas encuestas (telefónicas a 900 personas con un margen de error no inferior a 3.3%) fueron realizadas por un servicio de votación controlado por el Kremlin. A los encuestados se les preguntó no sólo si la guerra debería haber comenzado en primer lugar, sino también si va de acuerdo al plan y si debería continuar.
Después de nueve meses de guerra en Ucrania, cada vez menos rusos creían que Putin hizo lo correcto al iniciar el conflicto: 60% al 17 de noviembre. Todavía es una mayoría, pero estuvo en su nivel más bajo en seis meses y cayó 10 puntos porcentuales desde la primavera.
La edad parece ser un factor importante en las respuestas. En la categoría de 18 a 45 años, alrededor de 52% de los encuestados dijeron que pensaban que era correcto comenzar la guerra. Los encuestados más jóvenes, que constituyen una cuarta parte de la población y generalmente obtienen su información de Internet, representan la mayor parte de la caída general en el apoyo a la guerra desde el comienzo de los combates.
En el grupo de mayor edad (mayores de 45 años), 88% aprueba la decisión de Putin de ir a la guerra. Aunque este es también el nivel más bajo de aprobación desde la primavera, no ha habido cambios dramáticos.
Otro matiz interesante es que, entre las personas más jóvenes, ha habido un fuerte aumento en el número de encuestados que respondieron “difícil decirlo”, ahora con ~34%. Esta podría ser una forma de evitar responder a la pregunta, ya que según Yekaterina Schulmann, politóloga e investigadora de la Academia Robert Bosch en Berlín entrevistada por los reporteros, indicó que “es posible que un encuestado piense que la respuesta que quiere dar es incorrecta, por lo que no la da”.
Asimismo, atribuyó el creciente número de respuestas “inseguras” a la movilización “parcial” de Rusia anunciada en septiembre. “La gente tiene mucho miedo. Sospechan que las encuestas las está haciendo el Estado y que están siendo observadas”, dijo.
Respecto a si los encuestados creen que la operación militar en Ucrania va según lo planeado, desde el verano, el número de personas que creen que la guerra no va de acuerdo con lo planeado ha ido en constante aumento. Conforme a los últimos datos de la encuesta, esta alcanzó recientemente su nivel más alto: 42%. Al mismo tiempo, el número de encuestados que creen que la guerra va según lo planeado ha tenido una tendencia a la baja. La última cifra de noviembre es la más baja de la historia: sólo 22%.
Tanto las generaciones más jóvenes como las mayores están generalmente de acuerdo en esta pregunta; sin embargo, entre los rusos de 18 a 45 años, hubo un aumento notable en la conciencia de los fracasos militares tras el anuncio de la movilización.
La rendición de Kherson y otras derrotas militares en medio de la exitosa contraofensiva llevada a cabo por las Fuerzas Armadas de Ucrania no han tenido un impacto serio en las opiniones de la gente, pero han creado un trasfondo negativo.
De acuerdo con los autores, “hay un número creciente de personas que creen que la guerra no va bien, pero cuando les preguntas por qué, su primera respuesta es que se ha prolongado [demasiado], lo que significa que las cosas no han ido según lo planeado. La segunda respuesta más popular es la declaración de movilización, lo que significa que el ejército profesional está fallando”.
Paradójicamente, a pesar de que cada vez más personas creen que la guerra nunca debería haber comenzado, la proporción de quienes apoyan la continuación de la guerra ha ido en aumento. A partir del 17 de noviembre, 67% apoyaba continuar la lucha y sólo a 18% de los encuestados le gustaría que las autoridades pusieran fin a la guerra, la cifra más baja en seis meses. Este aparente aumento del militarismo se observa tanto entre los encuestados más jóvenes como entre los mayores.
Conforme a una entrevista realizada por los periodistas entre expertos, sugirieron que la causa fue un cambio en la producción de propaganda de Rusia. “Recientemente, los propagandistas han estado promoviendo la idea de que no es tan importante si fue correcto o incorrecto que Rusia comenzara todo esto. Pero ahora está supuestamente claro que Rusia está luchando contra la OTAN, y Rusia será aplastada si no gana”.
Por ejemplo, Denis Volkov, director del Centro Levada, dijo que los sociólogos observaron un fenómeno semejante en 2014 cuando Rusia anexó Crimea e inició un conflicto en el este de Ucrania.
“Esta es una clase típica de lógica”, dijo. “¿Valió la pena? Probablemente no, porque el costo está aumentando, incluido el costo para las personas a nivel individual; sin embargo, dado que nos metimos en este lío, podríamos seguir adelante.”; sin embargo, Volkov señala que, cuando a los encuestados se les ofrece una alternativa como las conversaciones de paz, un número creciente de personas elige esta opción. “El estado de ánimo general es terminar todo rápidamente, pero sin grandes concesiones”, y agregó que el apoyo a las negociaciones creció después de la movilización.
En general, los datos de estas encuestas secretas del Kremlin sugieren que las personas siguen siendo más o menos leales a las autoridades. “Estas encuestas reflejan a la sociedad rusa como inerte y asustada; un país con la espalda rota”, indicaron los expertos a través de los periodistas. “Esta no es una mala noticia para el modelo político autoritario, ya que con ciudadanos así se puede hacer cualquier cosa, todo menos movilizarse”.
Fuente: Moscow Times (Farida Rustamova y Maxim Tovkaylo).