Chiapas es, junto con Morelos, el estado que ha sido gobernado por la mayor cantidad de partidos políticos distintos (4), por lo que tampoco extraña que en las elecciones presidenciales –al menos desde 2000– no siempre haya dado la mayoría de sus votos al partido del que finalmente salió el Presidente de la República.
En todas las entidades del país no es secreto que hasta la década de 1990 el PRI era no sólo la fuerza política dominante, sino que acaparaba todos los cargos públicos de alto nivel, pero poco a poco ha ido perdiendo fuerza y gubernaturas. En el caso de Chiapas, el PRI perdió la gubernatura en 2000 y hasta la fecha no la ha recuperado, ya que de 2000 a 2012 estuvo bajo administración del PRD; de 2012 a 2018 bajo el PVEM; y desde 2018 bajo el mandato de Morena.
De las diez elecciones presidenciales desde 1964, los chiapanecos le han dado su voto al que a la postre terminó siendo el Presidente de la República en ocho ocasiones; sin embargo, en las últimas cuatro ediciones han sido dos veces al no ganador (en 2000 le dio la mayoría de sus votos a Francisco Labastida del PRI [43.09%] y el ganador fue Vicente Fox del PAN; y en 2006 le dio la mayor parte de sus sufragios [43.46%] a la alianza del PRD-PT-Convergencia que tenía como candidato a Andrés Manuel López Obrador y el triunfador fue Felipe Calderón) y al ganador (en 2012 a Enrique Peña Nieto del PRI con 23.50%; y en 2018 a Andrés Manuel López Obrador de Morena con 49.49%.
Los menos populares
En la gráfica se observa que, uno de los partidos con más años de contar con registro a nivel nacional, el PAN, no goza exactamente de gran popularidad en el estado del sureste. El máximo porcentaje que el blanquiazul ha recibido en el lapso estudiado ha sido 26.45 (Fox) pero aún así quedó abajo del PRI por casi 20 puntos porcentuales (y tomando en cuenta que iba en alianza con el PVEM) y apenas por arriba del PRD por 1.5 puntos.
Asimismo, desde esa elección presidencial, sus números han ido en descenso, tanto que en la elección más reciente (2018) regresaron a niveles de los que tenía en la década de 1980, algo no muy distinto a lo que le ocurre al PRD, que pasó de recibir 43.36% de los votos de los chiapanecos en 2006, a sólo 2.37% en 2018.
Un vuelco más radical se aprecia en los números del PRI, que llegaron a ser hasta de 99.55% en 1976 para José López Portillo a 11.23% que recibió José Meade en 2018.
En la próxima jornada electoral del 2 de junio, ¿a quién le dará su mayoría de votos el estado de Chiapas?