Las elecciones presidenciales de 2006 han sido las más cerradas en la historia de México. Prácticamente empatados llegaron a la recta final Felipe Calderón (PAN) y Andrés Manuel López Obrador, de la Coalición por el Bien de Todos (PRD-PT-Convergencia). El país tuvo que esperar casi cinco días para conocer los resultados finales. Con apenas 0.56 puntos porcentuales de diferencia, Calderón obtuvo el triunfo.
Ante el dictamen del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), la oposición denunció diversas irregularidades en torno al proceso electoral del 2 de julio, con la acusación de que se había orquestado un fraude a través de varios factores que impactarían en el resultado definitivo. Andrés Manuel López Obrador se autoproclamó presidente legítimo de México tras no reconocer el triunfo de Felipe Calderón en los comicios.
