Nuevo León era el único estado del país en el que los partidos de la 4T (Morena, PT y PVEM) no tenían representantes en el Congreso local y apenas unos cuantos municipios (3) antes de la jornada electoral del pasado 2 de junio; sin embargo, ahora suman 8 presidencias municipales y una cuarta parte de las curules.
Al iniciar la LXXVI Legislatura del estado (para el periodo del 2021-2024), el partido guinda tenía dos curules ocupadas: una por mayoría relativa en el XVII distrito con Anylu Hernández Sepúlveda y otra por representación proporcional, Jéssica Elodia Martínez; sin embargo, ambas cambiaron de partido en el transcurso. La primera pasó al PT en 2021 y después se declaró sin partido en 2022, mientras que la segunda abandonó la bancada de Morena para unirse a la del PRI en 2023.
Tras las elecciones anteriores, Movimiento Ciudadano sigue siendo el partido puntero en la cantidad de alcaldías y segundo en diputaciones, pero tuvo un retroceso importante. En el primer caso, tenía 22 alcaldías bajo su mando, diez más que el PAN y el PRI, incluyendo a Monterrey, pero después de la reconfiguración electoral, ahora tiene seis menos, entre ellas la capital, que ganó la alianza PAN-PRI-PRD con Adrián de la Garza Santos.
Bajo esta primera comparación, se puede observar que el PAN recuperó terreno y ahora tiene un municipio menos que MC, mientras que el PRI, si bien tuvo una victoria importante en Monterrey, sigue cediendo terreno al perder cuatro municipios; además, aunque aún detrás de los tres partidos mencionados, Morena y sus aliados aumentaron su número de tres a once municipios. En esto, el partido local Esperanza Social (ESO) dio la sorpresa al ganar con Judith Ibarra la alcaldía de General Zaragoza.
Por otra parte, el panorama en el congreso local tuvo una recomposición significativa, ya que hasta la legislatura previa, MC, PAN y PRI dominaban las curules; sin embargo, los partidos de la 4T tuvieron una muy buena jornada electoral al ganar 11 curules (cinco por mayoría relativa) y apropiarse de 26.2% de los lugares y comenzar a hacer ruido.
Un caso curioso es que a pesar de perder su registro no sólo a nivel nacional, sino también estatal al no lograr al menos 3% de los votos ya fuera en las elecciones de ayuntamientos o para el congreso, el PRD sí obtuvo tres curules por mayoría relativa (los distritos V y XVI en Apodaca y el VI en Monterrey), pero se sabe que las tres candidatas ganadoras (Gabriela Govea, Elsa Escobedo y Perla Villarreal Valdez, respectivamente) en realidad pertenecen al PRI, por lo que lo más probable es que, para que no se declaren “sin partido”, terminen por regresar al tricolor y, por lo tanto, se lleguen a modificar los lugares plurinominales.
